No Hay Trinidad
Un pastor que predicó tres dioses
Se acostó en su cama para descansar
De repente los cielos se abrieron
Y él se encontraba en aquel gran día del juicio final
Alí estaba un gran trono blanco y uno sentado, no cabían más
Y los muertos grandes y pequeños de pie ante el trono
Los libros abiertos y otro libro más
Uno a uno los iban llamando y fueron juzgados
Por todas las obras que estaban escritas, nada que explicar
Y si alguien no se hallaba inscrito en el Libro de Vida
Allí lo lanzaban, al lago de fuego, qué calamidad.
Él se hallaba sereno y tranquilo y dijo mi nombre seguro allí está
Alguien dijo, su nombre lo siento, pero aquí en el Libro inscrito no está
Coro
Es Jesús el Salvador, es Jesús mi ayudador
/El Señor Jesucristo es el Padre,
También es el Hijo,
Espíritu es/
De inmediato preguntó la causa
Del por qué no estaba inscrito en el libro ¿Cuál fue la maldad?
Una voz muy potente le dijo que él había enseñado
Y había predicado aquella doctrina de la gran ramera que es la trinidad
Es entonces cuando se aparecen todos los apóstoles, también los profetas,
Que les demostrara que tan solo uno fuera bautizado en la trinidad
Se dio cuenta que había despreciado
El bautismo en el nombre del Señor Jesús por la trinidad
Se sintió suspendido en el aire,
Cuando lo lanzaron comenzó a gritar
Despertó en el piso llorando, había sido un sueño ¡Qué felicidad!
Hoy da gracias al Señor Jesús porque le ha mostrado que no hay trinidad