Nuestro foro Pentecostales Apostólicos de Nombre http://www.pentecostales.notlong.com/recibimos la siguiente pregunta:

«Hemos visto que por estos días (octubre de 2008), un grupo de científicos del CERN (Centro Europeo de Investigaciones Nucleares) congregados en la frontera entre Suiza y Francia, están intentando recrear la teoría del Big Bang, por medio de una máquina llamada LHC (Gran Colisionador de Hadrones), para tratar de demostrar así el origen del universo por medio de la llamada gran explosión. Algunos están seguros de que este experimento será un éxito, mientras que otros no lo creen. ¿En caso de que aquel experimento tuviera éxito, esto podría afectar la fe cristiana y la fe hacia la Biblia?»

 

Estimados hermanos y amigos, reciban mi saludo en el Nombre de Jesucristo, Nombre que es sobre todo nombre. Dios manifestado en carne, Único Dios y Salvador.

La Palabra de Dios nos enseña:

«Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la Palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía» (Hebreos 11:3).

Muy interesante la pregunta. Sabemos que el hombre ha tratado de encontrar y explicar el origen de todas las cosas fuera de la Biblia, o como llaman ellos fuera de la religión. Lo cierto es que sus descubrimientos de basan en cálculos y mediciones matemáticas en las que ellos no se ponen de acuerdo y las tratan de explicar con teorías. Las teorías son solo especulaciones, suposiciones de la mente y curiosidad del hombre. Son solamente teorías.

La teoría del Big Bang, trata de explicar el origen del Universo a partir de un gran estallido (literalmente), constituyendo el momento en que «de la nada» emerge toda la materia, es decir, el origen del Universo. Ellos dicen que la materia, hasta ese momento, era un punto de densidad infinita, que en un momento explotó generando la expansión de la materia en todas las direcciones y creando lo que conocemos como nuestro universo.

Ellos dicen que inmediatamente después del momento de la explosión, cada partícula de materia comenzó a alejarse muy rápidamente la una de las otras, de la misma manera que al inflar un globo éste va ocupando espacio expandiendo su superficie. Los físicos en su teoría han reconstruido una cronología de los supuestos hechos a partir de un 1/100 de segundo después del Big Bang. La materia lanzada por la explosión en todas las direcciones está constituida exclusivamente por partículas elementales como: Electrones, Positrones, Mesones, Bariones, Neutrinos, Fotones, y un total de 89 partículas conocidas hasta hoy.

Bueno, acabo de explicar lo que supuestamente ellos han descubierto hasta hoy para explicar el origen del Universo, pero ¿Qué de la pregunta sobre el último experimento que se está haciendo para probar que el Universo ha sido formado por sí solo y no por la obra de un Creador llamado Dios? Si los científicos tuvieran éxito: ¿Puede afectar la fe cristiana y la fe hacia la Biblia?

Si ellos aceptan que había una materia como un punto de densidad infinita que explota, y de ahí se expande esa materia en todas las direcciones formando el universo, la pregunta sería; ¿Quién puso esa materia ahí para que explotara? Tiene que haber una mano, una mente superdotada, una autoridad que creó esa materia, de la cual se formaron todas las demás cosas. ¿No es curioso que lo que los científicos tratan de explicar con sus teorías lo que la Biblia narra con detalles? En caso de que hubiera una explosión, esa explosión surgió por orden del Creador, al cual ellos tratan de negar.

Mi contestación a la pregunta de los estudiantes universitarios de que si dichos descubrimientos podrían afectar la fe cristiana y la fe hacia la Biblia, es no. NO va afectar a los que estamos cimentados en la Palabra de Dios, NO va afectar a los que hemos tenido una experiencia real con el Dios Creador de los cielos, la tierra y el universo. Es probable que afecte a los cristianos apáticos, insípidos, sin compromiso, sin disciplina espiritual, de doble ánimo e inconstantes en todos sus caminos. La Biblia dice en Santiago 1:6-8: «porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. No piense, pues, quien tal haga que recibirá cosa alguna del Señor. El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos».

Nuestra fe no esta basada en teorías, especulaciones o experimentos humanos. Nuestra fe está basada en la Palabra de Dios la cual es inspirada. «Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos» (Salmos 19:1). La formación del Universo y el orden del planeta tierra, no sucedió como una casualidad. El verdadero creyente rechaza las explicaciones humanas que quieran sacar a Dios del origen de todas las cosas descubiertas por el hombre. El verdadero creyente acepta la revelación bíblica sobre el Universo y por eso se inclina a alabar al Hacedor.

El Dios de la creación se revela en la Biblia como un ser infinito y eterno, que existe por sí mismo y que es la Primera Causa de todo lo que existe. En la creación del Universo y la Tierra nunca hubo un momento en que Dios no existiera. «Antes que naciesen los montes y formases la tierra y el mundo, desde el siglo y hasta el siglo, tú eres Dios» (Salmos 90:2). En otras palabras, Dios existió eterna e infinitamente antes de crear el universo finito. Él es anterior a todas las cosas creadas en el cielo y en la tierra. El universo fue ordenado por Dios y nuestro planeta tierra también fue ordenado por Dios.

Dios creó materia y sustancia que no tenía existencia alguna anteriormente. Vea los pasos de la creación, todo fue ordenado por el poder de su Palabra. Dios tiene derechos soberanos sobre toda la creación en virtud de ser su Creador. «En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas» (Génesis 1:1-2). Al contemplar e investigar todo el cosmos creado, vemos desde el inmenso espacio del universo la belleza y el orden de la naturaleza. No podemos menospreciar, sino admirar la majestad del Señor Dios, el Creador.

No es casualidad que el planeta tierra sea el único que tiene vida, mares, vegetación y esté ordenado. Todos los demás planetas están exactamente como estaba el planeta tierra antes de ser ordenado por Dios. Los científicos envían naves espaciales, toman fotos, recogen muestras del suelo y solo encuentran planetas desordenados y vacíos. ¿Por qué será que el planeta tierra es el único que está ordenado? La contestación es clara, la Palabra de Dios nos narra como fueron creadas todas las cosas, pero el hombre en su intento de negar a Dios y a su Palabra, quiere buscar otras explicaciones fuera de la Biblia. El resultado final de las investigaciones científicas, se conocen hoy por el nombre de teorías, sí solo teorías.

Las teorías de los científicos tratan de explicar el origen y desarrollo del universo con la suposición de que no hay ningún Creador personal y divino que hizo y formó el Universo y la Tierra. Solo pueden decir, que todo comenzó a existir por una serie de sucesos casuales que ocurrieron durante miles de millones de años. Estas conclusiones no son verdaderamente científicas. Digo esto, porque según el método científico, deben basarse todas las conclusiones en la prueba irrefutable deducida de experimentos que puedan reproducirse en cualquier laboratorio. Sin embargo, no se ha ideado ni puede idearse ningún experimento que pruebe y verifique las teorías en cuanto al origen de la materia a partir de una supuesta explosión gigantesca conocida hoy como el Big Bang.

Por último, puedo decir con mucha seguridad que las explicaciones científicas sobre el Big Bang son solo unas hipótesis sin prueba científica. Lo más curioso de todo esto, es que según ellos estas hipótesis deben de ser aceptadas por fe en sus teorías humanas. Esto es lo que están enseñando en las escuelas y universidades a los estudiantes. Digo y repito que jamás dichas teorías afectarán mi fe cristiana y mi fe en la Biblia. La fe del pueblo de Dios, está en el Señor y en su revelación inspirada, la cual afirma que Él es quien hizo todas las cosas de la nada. «Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la Palabra de Dios, de modo que lo que se ve fue hecho de lo que no se veía» (Hebreos 11:3).

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *