Algunos de ustedes podrán haber visto una noticia que ha circulado por todos los medios noticiosos, con títulos llamativos como: «Dios No Creó El Universo, Dice Hawking» y «Por Qué Dios No Creó El Universo». Uno esperaría encontrar en aquellas noticias, algún argumento con algún nuevo descubrimiento científico, que demostrara que el universo es capaz de crearse a sí mismo, por lo cual no necesitaría de Dios. Sin embargo, después de leer los artículos, esa expectativa se convertirá rápidamente en decepción.

Stephen Hawking,  es probablemente el físico vivo más famoso. Mientras que es claramente un hombre brillante, su argumento acerca de la suficiencia de los procesos naturales para explicar el origen del universo, es realmente vergonzoso. Considere la siguiente afirmación de Hawking: «Dado que existe una ley como la de la gravedad, el universo pudo crearse a sí mismo -y de hecho lo hizo- de la nada. La creación espontánea es la razón de que exista algo, de que exista el universo, de que nosotros existamos. No es necesario invocar a Dios para encender la mecha y poner en marcha el universo.»

¿Por dónde empezar? En primer lugar, mientras que Hawking está tratando de explicar cómo algo podría surgir de la nada, sólo explica cómo algo (el universo) viene de otra cosa (de las leyes físicas, a saber, de la gravedad). La nada verdadera, es la ausencia de todos y cada uno de los existentes, incluyendo a las leyes físicas. Así que, ¿de dónde vienen las leyes de la física?

En segundo lugar, es imposible conseguir algo de la nada. Mientras que las cosas existentes tienen el potencial de convertirse en otra cosa, «nada» no tiene ningún potencial para convertirse en «algo», porque nada, literalmente significa «no ser, o carencia absoluta de toda existencia.» La potencialidad es una cosa, así que «nada», debe excluir la potencialidad. La potencialidad sólo es inherente dentro de lo existente. Así que si alguna vez se obtuviera la nada absoluta, no habría nada todavía. Algo, solo puede venir de algo más. De la nada, nada sale. (Para más información, vea mi serie de artículos titulados, «Pensando Acerca de Todo Contra Nada» partes 1, 2, 3 y 4).

En tercer lugar, es incoherente demandar que el universo puede crearse a sí mismo. Para que el universo pudiera autocrearse, literalmente tendría que existir antes de que existiera. Sin embargo, si es que existía antes de que existiera, no tendría ninguna necesidad de crearse a sí mismo, porque ya existía. La auto-causalidad es incoherente.

En cuarto lugar, las leyes de la física no pueden ser la causa del universo/multiverso, porque las leyes físicas son parte del efecto. Las leyes de la física surgieron cuando el universo físico llegó a existir, por lo tanto son dependientes del universo físico. Como escribió James Anderson, «Las leyes de la naturaleza presuponen la existencia de la naturaleza, así como las leyes de Escociapresuponen la existencia de Escocia.» [1] Decir que las leyes físicas pueden explicar el origen del universo, es como pensar que uno puede explicar que un padre vino a la existencia a causa de su hijo. El efecto no puede ser la causa.

En quinto lugar, como señalé en mi artículo titulado «Los milagros y las Leyes de la Naturaleza», las leyes físicas no tienen un estatus ontológico. Ellas no son «cosas» que existen por fuera del mundo real, ocasionando que otras cosas sucedan, sino que más bien son generalizaciones inductivas que hacemos acerca del comportamiento de la materia, sobre la base de la observación repetida. La observación de que la materia siempre se comporta como X, no explica qué es lo que está causando X, o el comportamiento de esa manera. Hawking parece haber confundido ley con agencia. Los agentes hacen que las cosas sucedan. Las leyes sólo describen los patrones de comportamiento observados.

Hawking no cree solamente que Dios no es necesario para explicar el origen del universo, sino que también cree que Dios no es necesario para explicar el origen de la vida inteligente ¿Por qué? Según él, por el descubrimiento de planetas por fuera de nuestro sistema solar (exoplanetas). Hawking dice que el descubrimiento de los exoplanetas: «Hace de las coincidencias de nuestras condiciones planetarias -la singularidad del sol, la combinación afortunada de la distancia tierra-sol y de la masa solar- algo mucho menos notable, y mucho menos convincente, de pruebas de que la tierra fue cuidadosamente diseñada sólo para nosotros, solamente a favor de los seres humanos.»

No veo cómo se sigue, que si el universo contiene planetas por fuera de nuestro sistema solar, Dios ya no es necesario para explicar los muchos afinamientos constantes y necesarios para la vida avanzada. Tal vez si se pudiera demostrar la existencia de muchos planetas como el nuestro, ya no habría razón para pensar que la Tierra es única, pero esto no supone un perjuicio para concluir que nuestro planeta fue diseñado. El diseño es deducido del arreglo funcional y específico de las partes. Si existieran otros planetas como la tierra, y cada planeta «como la tierra» mostrara la misma disposición y especificación de las piezas de nuestro planeta, la conclusión correcta debe ser que todos ellos fueron diseñados, y no que ninguno de ellos no fue diseñado.

Cabe señalar que entre los 490 exoplanetas que hemos descubierto y estudiado hasta la fecha, ninguno tiene las propiedades que sabemos que son necesarias para el soporte de la vida avanzada. Ellos son gigantes gaseosos como Júpiter, planetas rocosos sin agua, no están en la zona habitable de la galaxia, etc. En otras palabras, ninguno de ellos se parece a nuestro propio planeta. Así que el hecho de que haya planetas por fuera de nuestro sistema solar, no socava la inferencia de diseño que observamos en nuestro propio sistema solar. Ambas son observaciones interesantes, pero no son relevantes para la cuestión de Dios/diseño.

Finalmente, Hawking apela a la posibilidad de un multiverso para explicar el fino ajuste de las constantes físicas. Él escribe:

«Nuestro universo parece ser uno de los muchos, cada uno con diferentes leyes… Cada universo tiene muchas historias posibles y muchos estados posibles. Sólo unos pocos permitirían la existencia de criaturas como nosotros. Aunque nosotros seamos endebles e insignificantes dada la escala del cosmos, esto nos hace en cierto sentido, los señores de la creación.» [2] 

Para considerar todos los problemas asociados con la hipótesis del multiverso, ver mi tratamiento en el artículo titulado «El Multiverso, Dios y la Razón».

Referencias:

[1] James Anderson. Stephen Hawking contra Dios
 http://proginosko.wordpress.com/2010/09/05/stephen-hawking-versus-god/
visitada el 7 de septiembre de 2010
[2] Stephen Hawking y Leonard Mlodinow. ¿Por qué Dios no creó el Universo?
 http://online.wsj.com/article/SB10001424052748704206804575467921609024244.html 
visitada el 4 de septiembre de 2010.

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