Por Edwing López
¿En qué consiste la blasfemia contra el Espíritu Santo? ¿Cómo sabemos que alguien a blasfemado contra el Espíritu Santo?
Mateo 12:31-32 “Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no les será perdonada. (32) A cualquiera que dijere alguna palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que hable contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo ni en el venidero.”
Marcos 3:28-29 De cierto os digo que todos los pecados serán perdonados a los hijos de los hombres, y las blasfemias cualesquiera que sean; (29) pero cualquiera que blasfeme contra el Espíritu Santo, no tiene jamás perdón, sino que es reo de juicio eterno.
La blasfemia contra el Espíritu Santo es un “pecado imperdonable.” Este pecado se comete verbalmente, pero cuando leemos hasta el versículo 34 de Mateo 12, nuestro Señor Jesús aclara que de la abundancia del corazón habla la boca. Mateo 12:34 “¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.”
Parecería que este pecado es cometido por la palabra proferida por un corazón que desprecia al Espíritu Santo, pero en realidad se blasfema contra el Espíritu Santo, cuando se le atribuye a Satanás la obra y la manifestación del Espíritu Santo.
Cuando usted estudia todo el contesto de lo que expresa Mateo 12:22-37, podemos notar que aquí hay una advertencia solemne a todos los hombres para que tengan cuidado en la manera que juzgan la manifestación del Espíritu Santo.
En Marcos 3:28-29 jesús también nos dice; “De cierto os digo que todos los pecados serán perdonados a los hijos de los hombres, y las blasfemias cualesquiera que sean; (29) pero cualquiera que blasfeme contra el Espíritu Santo, no tiene jamás perdón, sino que es reo de juicio eterno.”
Tanto en Mateo como en Marcos es evidente que la blasfemia contra el Espíritu Santo se convierte en un pecado imperdonable, pues la salvación nos llega por completo a través del Espíritu Santo. Cuando un hombre blasfema, el Espíritu Santo se aparta de su vida, entonces, ¿Por qué medios puede salvarse? No hay ninguno.
El pecado de la blasfemia contra el Espíritu Santo sin duda es considerado como un pecado de muerte por el cual no tenemos que rogar, porque sería inútil rogar por dicho perdón, pues no puede haber respuesta de parte de Dios.
“Si alguno viere a su hermano cometer pecado que no sea de muerte, pedirá, y Dios le dará vida; esto es para los que cometen pecado que no sea de muerte. Hay pecado de muerte, por el cual yo no digo que se pida” (1 Pedro 5:16).
Que quede claro que para poder cometer el pecado de la blasfemia la persona tiene que tener un conocimiento claro del movimiento y la manifestación del Espíritu Santo. Este pecado lo comenten con frecuencia personas convertidas que habiendo experimentado el poder del Espíritu Santo, luego le atribuyen la manifestación del Espíritu Santo a la obra de Satanás. ¡Cuidado!, mucho, ¡Cuidado!.
Ahora, a menudo surge la pregunta; ¿Puede un pecador cometer el pecado imperdonable de blasfemar contra el Espíritu Santo? Todo depende del conocimeinto que tenga acerca del Espíritu Santo. La mayoría de los pecadores que no conocen la Palabra de Dios, tampoco conocen sobre la obra y la manifestación del Espíritu Santo, por lo tanto ellos no pueden cometer dicho pecado de blasfemar contra el Espíritu Santo.
Por otro lado, tenemos a otro grupo de pecadores que si tienen mucho conocimiento de la Palabra de Dios. Estos son los que tienen familiares, padres y hermanos cristianos. Aunque nunca se han convertido a Cristo han recibido estudios bíblicos, han sido testigos en muchas ocasiones del poder de Dios, hasta han asistido con frecuencia a la iglesia. Ellos si pueden cometer el pecado imperdonable si le atribuyen la manifestación y la obra del Espíritu Santo a la obra de Satanás.
Es por esto, que Jesús le dice tanto a los saduceos como a los fariseos tengan cuidado de atribuirle la obra y manifestación de Dios a Satanás (Beelzebú principe de los demonios).Mateo 12:24; “ Mas los fariseos, al oírlo, decían: Este no echa fuera los demonios sino por Beelzebú, príncipe de los demonios.”
Marcos 3:22-23; “ Pero los escribas que habían venido de Jerusalén decían que tenía a Beelzebú, y que por el príncipe de los demonios echaba fuera los demonios. (23) “Y habiéndolos llamado, les decía en parábolas: ¿Cómo puede Satanás echar fuera a Satanás?”
El Apóstol Pablo antes de su conversión a Jesucristo nos dice que él era un blasfemo, pero no cometió el pecado imperdonable, porque él blasfemó con ignorancia e incredulidad.1 de Timoteo 1:16; “ Doy gracias al que me fortaleció, a Cristo Jesús nuestro Señor, porque me tuvo por fiel, poniéndome en el ministerio, (13) habiendo yo sido antes blasfemo, perseguidor e injuriador; mas fui recibido a misericordia porque lo hice por ignorancia, en incredulidad.”
Hay otros pecados que se pueden cometer contra el Espíritu Santo, pero ese tema lo voy a desarrollar en otro mensaje separado de este.
Que nuestro Señor Jesucristo te bendiga ahora y siempre.